Descripción o resumen: Edgar, con trece años y mucha fantasía en la cabeza, tiene que aceptar el final de una infancia mágica al lado de su hermana. Eva, cuatro años y medio mayor que el chico, tenía sólo ocho cuando su madre le encomendó todos los cuidados del niño. El contacto diario en la intimidad de la alcoba, el candor de la chiquilla descubriéndole el mundo sensual y el florecer de sus cuerpos a la adolescencia les llevaron gradualmente a libidinosas prácticas difíciles de erradicar.Eva, para rehacer su vida según las convenciones sociales, decide marcharse un año al extranjero. También Edgar debe alejarse de ilusiones imposibles, le insiste su hermana, y relegar al pasado aquellas prácticas que nunca debieron haber empezado. «Un tiempo maravilloso que siempre guardaremos en un rinconcito de la memoria».La noche anterior al éxodo de Eva, con el propósito de mitigar la tristeza que la inminente renuncia a su mundo vaya a producirles, sellan un pacto por el que ambos, a partir de entonces, se obligarán a encontrar la parte placentera de toda acción que realicen. Edgar, dolorido por la separación y hostigado por el mandato fraterno de rechazar la esperanza, se impone el deber de cumplir rigurosamente el conjuro. Concentrándose en el presente para olvidar el futuro y relegar el pasado, consigue sublimar y deleitarse en cada uno de los cinco sentidos. Con denodado esfuerzo logra gozar desde la cotidiana práctica de cepillarse los dientes hasta presenciar la agonía de su abuela.Las convenciones sociales, la enrevesada crónica familiar, la disyuntiva entre el hedonismo y la proscrita ilusión, el íntimo soporte de una esperanza y un sustancioso conglomerado de criterios amigos, enfrentan al sentido común con los sentimientos del joven protagonista y conducen esta amena historia hasta un final razonablemente inesperado.